

En general,
no son muy distintos,
físicamente
no se destacan,
inteligencia promedio,
ningún signo relevante.
Pero ahí están,
yo los veo,
yo los detecto
con mi busca-caminos,
en un universo de cien
veo su luz,
es mi hombre:
EL CHANTA,
el que anula,
el que todo me quita,
un maestro en el saber
y la indiferencia;
esa es mi especialidad.
Gusto de aquellos
incapaces de amar,
con el ego como ombligo,
maestros en el fingir,
escapistas,
obtusos
y egoístas.
Por alguna falta genética
siempre estoy en esa rueda,
no es falta de información,
tampoco una forma de ceguera
es simple y llanamente
falta de oxigeno en el cerebro
y exceso de latidos en el corazón...
A.O.C. 2010
no son muy distintos,
físicamente
no se destacan,
inteligencia promedio,
ningún signo relevante.
Pero ahí están,
yo los veo,
yo los detecto
con mi busca-caminos,
en un universo de cien
veo su luz,
es mi hombre:
EL CHANTA,
el que anula,
el que todo me quita,
un maestro en el saber
y la indiferencia;
esa es mi especialidad.
Gusto de aquellos
incapaces de amar,
con el ego como ombligo,
maestros en el fingir,
escapistas,
obtusos
y egoístas.
Por alguna falta genética
siempre estoy en esa rueda,
no es falta de información,
tampoco una forma de ceguera
es simple y llanamente
falta de oxigeno en el cerebro
y exceso de latidos en el corazón...
A.O.C. 2010
