domingo, 11 de junio de 2017

Anónimos sin voz




El mundo crece
en un eterno presente
frente a mis ojos,
tan próximo
que no alcanzo a percibir
algún cambio.

Alguien abrió 
esa puerta
en la que todos
pueden hablar libremente
y todos los egos pechugones
hacen fila
buscando la mejor luz
para ser vistos.

Las voces,
varias, miles de millones
suben y suben decibeles
para hacerse escuchar,
para ser elegidos
por esa multitud enajenada
que no escucha palabras
ni ecos de esas voces.
Nadie sobresale
en ese grito plano
abundante, colorido y ajeno
de una simple red social...

AOC. © 2017
Gráfica: Ania Tomicka // Sam Hyen Kim // Paul Binnie



No hay comentarios: